DIS, visualiza, explora y discute los posibles escenarios que el futuro presenta para el diseño, tanto aquellos ideales y deseables (utópicos), como aquellos temidos e inconvenientes (distópicos). El diseño, no sólo como profesiones de diseño, sino como una práctica constante en múltiples niveles y situaciones, ha sido parte activa y ha generado propuestas en las que persiste la esperanza de que somos capaces de modificar esas realidades apremiantes. Desde esta perspectiva, consideramos que actualmente se enfrenta a la necesidad de cambios profundos y sustanciales en su práctica, en su entendimiento como disciplina académica, en su educación para distintos niveles, o en su caracterización como profesión, entre muchos otros y debe ayudar a dar luz a el futuro de la civilización como la conocemos, de la humanidad, incluso de la vida misma en el planeta.